Siempre he sido fiel creyente del arte de visitar.Al fin y al cabo, el ser huesped te permite tener control de cuando llegas y cuando vas, asi como evitar regeretes o malos entendidos. Claro, no le llego de bombita...siempre aviso y llevo algo para el anfitrion(ron o bebida de preferencia). De esto trata el arte de visitar, de ser considerado, diplomatico y asertivo. En estos dias he podido visitar familia, un gusto que me he dado tanto por la melancolia de la epoca, como por el deseo de pasar un buen rato con seres queridos. Siento que cada vez domino mas este arte abstracto. No es lo mismo que te pongan pero para las visitas, o ver sonrisas entre dientes a ver sonrisas sinceras. Demas esta decir que mi agenda navidena esta llena, y la dieta no tiene espacio en ella...ya veremos luego de las fiestas de San Sebastian!
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