Este fin de semana ha sido un poco extraño. El viernes dejé a la gorda cuidando para así irme de janguin al 8 de blanco....como el los viejos tiempos. Entendí de que sí, son fueron tiempos de janga..aquellos tiempos. Ahora no resisto ni un whisky sour que ya estoy con la lengua pesá, antes me tomaba como cinco para sentirme así. Luego de descubrir que no tenía ni puta idea de donde ir a bailar, me rendí y a mimir pa la casa. Al otro día, me di cuenta que mi beba tenía casi dos meses, y me empezó la obsesión con las pantallas. Cada vez que la miraba, me venía a la mente alguna vieja imprudente diciendo "ahhh que lindo ese macho". Mira puñeta, macho serás tú!!!!! Así fue como empezé a ponerle lacitos(tanto que jodí que no le iba a poner de esas mierdas, pero la presión social pudo más), ropa de color rosa( buajj) y a peinarla( creanlo o no...la peino), nada...seguían diciendole que era un macho. Es así como tomé la desición. Fuí, pagué treinta pesos por unas patallas de oro(supuestamente) y una piedrita tornasol(que espero le dure como setecientos años) y le hice las pantallas. Demás está decir que cuando le dieron el primer puyaso, me arrepentí de ser tan pendeja y dejarme llevar por pensamientos ignorantes y sexistas.La próxima vez, espero no dejarme llevar por el coraje...Mi pupucha se quedó con el shooping y yo no lloré por no asustarla más. Pero me siento super culpable. Ahora ella esta durmiendo complacida, y yo arrepentida de haberla hecho llorar. Por mi madre que pa' las vacunas le va a tocar a Noel llevarla, porque yo no puedo volver a verla así.
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